La eficiencia energética es la relación existente entre la producción de un servicio, bien o energía y el gasto de la misma. La gestión y eficiencia energética se ha convertido en un tema de vital importancia no solo para viviendas particulares sino también para empresas e industrias.
En los últimos años se ha evidenciado que el precio de la electricidad ha ido en aumento, por tanto, resulta indispensable utilizar la energía de forma racional. Cada día más personas se esfuerzan para crear conciencia y darle a la eficiencia energética el lugar que siempre se ha merecido.
Cientos de empresas se han especializado en asesorar sobre ello, ayudando a distintos individuos y compañías a ser más competentes, reducir sus gastos y por supuesto, equilibrar sus balances. Dichas organizaciones disponen de departamentos centralizados capaces de gestionar, monitorear y optimizar el uso de la energía en sus instalaciones.
Y es que, si lo piensa, la gestión energética de una empresa es igual de importante que la gestión de otras áreas. La introducción de nuevas tecnologías enfocadas a aumentar la eficiencia energética de las empresas y negocios proporciona un mayor control y ahorro de costes. Gracias a estas herramientas, se hace más sencillo mejorar otros aspectos relacionados a la seguridad y a la calidad del sistema energético.
Beneficios de una gestión energética optimizada
Aumenta su nivel de competencia
Cuando las organizaciones deciden optimizar su consumo energético, su nivel de competencia se eleva, ya que pueden continuar desarrollando sus actividades regulares a un coste más bajo y con una mejor imagen para su marca.
Concientiza a sus trabajadores
La mejora de la eficiencia energética posibilita un mayor entendimiento de cómo se está utilizando la energía; de igual manera, genera conocimientosacerca de su potencial de ahorro.
Por otro lado, distintas investigaciones han comprobado que las empresas que abordan el tema de responsabilidad social y ambiental tienen trabajadores más orgullosos de trabajar para su organización. Esto hace que sientan un mayor nivel de satisfacción, lo que se traduce a una mayor productividad y un mejor entorno laboral.
Genera ahorros y mejora el control presupuestario
Como ya se ha mencionado, cuando se toma en serio el uso de la energía, se obtienen grandes beneficios. Uno de ellos es un sustancial ahorro de costes a largo plazo.
Reduce riesgos
Practicas cuestionables en el manejo de la energía de una empresa podrían ocasionar riesgos técnicos, accidentes del personal o incluso daños graves en los niveles de productividad. Usar la energía de forma consciente hace que los equipos se mantengan en buen estado y amplía su tiempo de vida.
Mejora la economía de la empresa
Las facturas de energía son uno de los gastos más grandes de una empresa. Las organizaciones que trabajan duro para reducir dichas facturas pueden aumentar su potencial, lo que influye positivamente en su economía.
Disminuye las emisiones de carbono
La implementación de esta gestión en su empresa ayuda a cuidar el medio ambiente y reducir la huella de carbono que se deja inevitablemente a causa de los gases de efecto invernadero. Es por ello que debería considerarse como un objetivo fundamental para todas las organizaciones.
Funciona para todas las empresas
No es necesario que maneje una empresa grande. Todas las empresas, independientemente de su tamaño pueden tomar las medidas necesarias para mejorar su nivel de eficiencia energética si se lo proponen.
Innovación y seguridad energética
Poner en funcionamiento un proyecto de eficiencia energética equivale a innovar tecnológicamente. Una vez se ha comprometido a estar a la vanguardia del ahorro energético, es imprescindible realizar cambios en el equipamiento y maquinaria de su compañía, lo cual hará que su negocio avance significativamente y que se reduzcan los fallos que atentan contra su salud financiera, ambiental y laboral.
En otras palabras, apostar por la gestión y eficiencia energética de su empresa es sinónimo de apostar por la competitividad de su organización. Lo que quiere decir que la eficiencia energética tiene un papel protagónico en la actual Industria 4.0.