Este tipo de trabajadores necesitan de una ayuda extra para poder llevar a cabo todas sus gestiones, principalmente las de carácter económico y financiero, de ahí que cobren mayor importancia las asesorías, como centros especializados en este tipo de situaciones.
En el momento que una persona decide registrarse como trabajador autónomo, debe tener en cuenta un gran número de aspectos para poder desarrollar su actividad sin ningún tipo de problema, y, sobre todo, con la tranquilidad de que no habrá controversias con Hacienda.
Hay que decir que iniciar una actividad como autónomo o de igual modo, abrir un negocio, requiere numerosas obligaciones fiscales, así como administrativas que, en la mayoría de los casos, no son fáciles de llevar. Precisamente por estos motivos, este tipo de trabajadores o también las empresas, deben contratar los servicios de una asesoría autónomos en Madrid o en cualquier otra localidad en la que se resida o se tenga el domicilio fiscal.
Estos profesionales se encargarán de gestionar procesos como la liquidación de impuestos, la declaración del IRPF o las cargas sociales, entre otras cosas. Trámites que, aunque todo trabajador debe hacerlos, aquellos que son autónomos lo tienen más complicado, puesto que a todo ello hay que añadir la gestión de la propia contabilidad o el pago mensual de la cuota que corresponde a la Seguridad Social, incluyendo las declaraciones al trimestre.
¿Por qué contar con una asesoría?
Teniendo en cuenta todos los trámites que los autónomos deben gestionar, resulta una buena opción contratar a una asesoría para que ayude a gestionarlos. Lo cierto es que las asesorías cuentan con expertos profesionales que llevarán al día todos estos procesos, para que el trabajador en cuestión no tenga que preocuparse de nada. ¿Cómo ayudan principalmente?
Informan
Lo primero que hay que decir con respecto a las asesorías es que suelen informar a los autónomos de cuáles son las normas vigentes en cuanto a materia fiscal, supervisando todas las modificaciones que pueden darse en cada momento.
Asesoran
Tal y como su nombre indica, una asesoría está para aconsejar a este tipo de trabajadores. Marcando unas pautas dentro de la legalidad que corresponde y teniendo como objetivo el mínimo pago tanto para la Seguridad Social como para Hacienda.
Trámites
Como es lógico, estos expertos se encargan de llevar a cabo todas las gestiones del día a día de los autónomos. Trabajan con el fin de quitar esa carga a sus clientes, realizando ellos mismos la mayoría de los procesos.
Soluciones
También ayudan en el caso de presentarse un problema, poniendo sobre la mesa todo tipo de soluciones, en base al conflicto que se haya generado, con el objetivo de cubrir todas las necesidades de los clientes.
Además de todo esto, no hay que olvidar mencionar que las asesorías son las que elaboran la liquidación de impuestos, ya sea por IVA o IRPF, al igual que se encargan de todo lo relacionado con la contabilidad de un trabajador autónomo.
¿Cómo elegir una buena asesoría?
Si es trabajador autónomo, es evidente que se hace necesaria una asesoría. En cualquier caso, a la hora de elegir una, es importante tener en cuenta una serie de aspectos, para poder escoger la más adecuada en base a las necesidades de cada uno.
De esta forma, una de las primeras cosas que hay que hacer es definir bien el modelo de negocio o actividad que se va a desarrollar y en base a eso, intentar elegir una asesoría que sea especializada en ese terreno o, en su defecto, que cuente en su equipo con expertos.
También es muy importante que la asesoría informe al cliente en todo momento, sea transparente con los datos que aporta y por supuesto, mantener una comunicación fluida y continua con sus clientes cada día.
De igual modo, deben aportar soluciones ante cualquier problema y sus expertos deben ser resolutivos.
Y por último, para tomar la decisión final y escoger definitivamente una asesoría, es esencial realizar una comparativa para ver cuál es la que ofrece mejor relación calidad-precios con respecto a sus servicios.