Economía

Carlos Ghosn: El ex entrenador de Nissan golpea con una nueva carga

El ex jefe de Nissan, Carlos Ghosn, ha sido acusado por la fiscalía japonesa de un nuevo cargo de abuso de confianza agravado.

Es la cuarta acusación contra el Sr. Ghosn y se refiere al supuesto uso indebido de los fondos de la empresa.

El joven de 65 años está detenido en Tokio y sus abogados han solicitado la libertad bajo fianza.

El Sr. Ghosn, que niega haber cometido ningún delito, ha dicho que las acusaciones son el resultado de un complot contra él.

Fue arrestado por primera vez en noviembre y pasó 108 días bajo custodia. Mientras estaba en libertad bajo fianza a la espera de un juicio, el ex jefe de automóviles fue arrestado de nuevo en Tokio el 4 de abril.

Los fiscales alegan que el Sr. Ghosn realizó un pago multimillonario a un distribuidor de Nissan en Omán, y que hasta 5 millones de dólares (3,8 millones de libras esterlinas) fueron canalizados a una cuenta controlada por el Sr. Ghosn.

La compañía que una vez dirigió, Nissan, ha presentado su propia denuncia penal contra el Sr. Ghosn, acusándole de dirigir dinero de la compañía para su propio enriquecimiento personal.

El Sr. Ghosn fue acusado por primera vez de subestimar su paquete salarial para los cinco años hasta 2015.

En enero, un nuevo cargo afirmaba que había subestimado su indemnización durante otros tres años. También fue acusado de una nueva y más grave acusación de abuso de confianza.

La caída en desgracia del titán de la industria ha atraído la atención mundial. El caso también ha puesto de relieve la lucha dentro de la alianza de fabricantes de automóviles y el sistema legal japonés.

Ghosn fue el arquitecto de la alianza formada entre el japonés Nissan y el fabricante francés de automóviles Renault, y en 2016 incorporó a Mitsubishi.

Se le atribuye el mérito de haber cambiado la suerte de Nissan y Renault a lo largo de varios años.

A principios de este mes, el Sr. Ghosn dijo que las acusaciones eran un complot y una conspiración contra él, acusando a los ejecutivos de Nissan de «puñaladas por la espalda».