Jugar a los videojuegos en el ordenador portátil cada vez es más habitual. Por este y otros motivos los ratones inalámbricos son la opción más demandada.
Estos dispositivos dejan atrás los problemas de desconexiones que solían preocupar a los gamers, y ahora ofrecen un rendimiento y una precisión a la altura de los modelos con cable. Continúa leyendo para aprender las características clave que debes tener en cuenta para elegir uno.
La baja latencia y el alto rendimiento
Uno de los mayores avances en los ratones inalámbricos es la mejora en la latencia. En los primeros modelos los tiempos de respuesta eran un problema, especialmente en juegos como la ruleta online. A día de hoy, gracias a las nuevas tecnologías, ofrecen tiempos de respuesta que rivalizan con sus contrapartes cableadas.
Un buen ratón gaming también debe tener una buena tasa de sondeo o polling rate, que mide cuántas veces por segundo el ratón informa sobre su posición al ordenador. Hay que tener en cuenta que para asegurar movimientos fluidos y precisos debe ofrecer al menos 1000 Hz. Con esto y los sensores ópticos avanzados, el rendimiento se refuerza y consigue una precisión milimétrica hasta en los momentos más intensos del juego.
La memoria integrada y la personalización de botones serían otro elemento crucial. Los ratones inalámbricos de gama alta permiten configurar perfiles específicos para diferentes juegos, lo que resulta una gran ventaja competitiva en títulos que requieren múltiples comandos rápidos.
La ergonomía y el diseño
Pasar horas jugando puede pasar factura a tus manos si el ratón no es cómodo de usar. La ergonomía es fundamental, y los mejores ratones inalámbricos para gamers están diseñados para adaptarse a distintos estilos de agarre: palm grip, claw grip o fingertip grip.
También es importante el peso del ratón. Los modelos más avanzados permiten ajustes para personalizarlo, algo ideal para quienes juegan a diario a los slots online y necesitan un equilibrio entre el control y rapidez y este tipo de ratones son adecuados para ello.
Otro detalle es la durabilidad de los materiales. Los ratones inalámbricos premium suelen contar con acabados resistentes al sudor y botones diseñados para soportar millones de clics, asegurando una vida útil prolongada incluso con uso intensivo.
La autonomía y la conectividad
La duración de la batería es un factor crucial. Nadie quiere quedarse sin batería en medio de una partida competitiva. Los mejores modelos ofrecen hasta 70 horas de autonomía con una sola carga, y algunos, pueden hacerlo de manera inalámbrica, eliminando la necesidad de cables y manteniendo el ratón operativo.
En cuanto a la conectividad, es importante que el ratón sea compatible con Bluetooth y receptores de 2.4 GHz. Aunque ambas opciones tienen sus pros y contras, la conectividad por 2.4 GHz sigue siendo la más recomendada para gaming.
La iluminación y la personalización
Muchos ratones están diseñados para complementar setups de gaming, oficinas elegantes o estaciones de trabajo creativas, adaptándose a las preferencias individuales de los usuarios.
Para muchos gamers, la estética es tan importante como el rendimiento. Los ratones actuales suelen combinar el diseño ergonómico con acabados visuales, e incluyen iluminación RGB personalizable, algo que permite sincronizar el color y los efectos con otros dispositivos.
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