Las hernias discales pueden aparecer a cualquier edad, sin embargo, existe una alta incidencia en las personas mayores, ya que su organismo está más debilitado y lleva a cuestas todos los malos hábitos que tuvieron durante toda la vida. Contar con un servicio a domicilio con un cuidador capacitado es una excelente alternativa, más aún, si se gestiona a través del maravilloso equipo de Beeping.
El paso de los años deja sus efectos en el cuerpo, más aún si se incurrió en algunos malos hábitos, como el sedentarismo, la obesidad, el consumo de tabaco y alcohol, y más. Una de esas consecuencias, sobre todo en una avanzada edad, aunque cualquier persona lo puede padecer, es la aparición de hernias discales.
El servicio de cuidado de mayores a domicilio siempre es una opción para mejorar su calidad de vida y que tengan una atención personalizada de la más alta calidad, más aún cuando el paciente tiene alguna patología, como es el caso de una hernia discal, una de las afecciones más comunes de la columna vertebral y que se siente en el área de la espalda.
Es muy importante que el cuidador tenga los conocimientos y la capacidad de dar la atención debida, ya que de eso dependerá que la persona mayor tenga al mínimo la incidencia de síntomas, incluso, que pueda mejorar, haciendo que cumpla el tratamiento indicado por el especialista y fisioterapeuta.
El servicio de más alta calidad
Al hablar de profesionales, hay que mencionar el nuevo servicio de cuidado de mayores que ha llegado al mercado español de la mano de la marca global Beeping.
Es una empresa que se trazó como misión mejorar la calidad de vida de las personas, brindando cariño mediante el mejor y más dedicado cuidado posible. Una de sus fortalezas es que los llamados ‘beepers’ o cuidadores, son elegidos bajo un proceso riguroso, que incluye entrevista personal, verificación de documentos, cursos y talleres en línea, así como formaciones constantes en la Academia Beeping, y mucho más.
En el caso de una persona con hernias discales leves, el cuidador tiene la capacidad de aplicar los tratamientos indicados, por ejemplo, aplicar frío seco para disminuir la inflamación, administrar adecuadamente fármacos, como pueden ser los antiinflamatorios, paracetamol o corticoides.
Lo mejor es prevenir
La mejor arma para evitar sufrir estas afecciones, sin duda, es la prevención. Pero, ¿cómo se puede prevenir la aparición de hernias discales?
Lo primero es conocer qué es una hernia discal. Es importante recordar que la columna vertebral está integrada por 33 vértebras, que entre sí, cuentan con unos discos de cartílago, que tienen dentro lo que se conoce como “núcleo pulposo”.
Estos discos tienen como función, conectar las vértebras para facilitar los movimientos de la columna, y también proteger la médula espinal, ubicada entre los discos y la parte posterior de las vértebras.
La hernia discal se produce cuando se hincha la zona interna del disco, o cuando el disco se mueve y se sale de su sitio. Sea cual sea la causa, el disco presiona los nervios de la médula espinal, que es lo que provoca el dolor de la hernia discal.
La prevención puede venir de diferentes formas. Una de las principales acciones preventivas es evitar el sobrepeso, lo ideal siempre es mantener el peso adecuado.
Recoger objetos pesados siempre de una manera correcta es una muy buena medida preventiva también. Se deben flexionar las rodillas y luego coger el peso de forma vertical.
La alimentación saludable es otro aspecto fundamental, así como acudir periódicamente al fisioterapeuta, para estirar y relajar espalda y cuello de manera correcta.
También es muy importante mantener siempre posturas correctas al estar sentados, de pie o caminando. De ser necesario, se puede recurrir a usar correctores de posición, que se pueden conseguir en centros de ortopedia o farmacias.
En el caso de presentar síntomas, es vital acudir al médico de manera inmediata, ya que esto puede evitar que se agrave la situación.