Las empresas que migran a Internet no solo invierten en marketing digital para mejorar la presencia de sus negocios y atraer leads, además de ello, los negocios digitales contratan servicios de hosting que les permiten tener webs funcionales, seguras y con un excelente rendimiento.
Aunque muy pocos lo saben, los servicios de hosting son la base sobre la que se cimentan las páginas web. Al contratar un servicio de alojamiento, las empresas tienen a su disposición servidores en los que pueden almacenar toda la información y las bases de datos de sus plataformas online.
Por este motivo, tener el mejor servicio de hosting es un requisito para todas aquellas Pymes que desean conectar con sus clientes en Internet. No se puede olvidar que, de este servicio, depende la seguridad de la web, su velocidad de carga, e incluso, su posicionamiento SEO.
¿Por qué invertir en el mejor servicio de hosting?
En el mercado es posible encontrar una gran cantidad de ofertas de hosting que pueden adaptarse a las necesidades de recursos de diferentes tipos de proyectos web. Por ello, a la hora de contratar un servicio de alojamiento web, no existe “el mejor hosting”, sino el que mejor se pueda adaptar a los requerimientos particulares de una empresa.
Esto quiere decir que antes de contratar un determinado hosting es necesario identificar el tipo de web que se desea desarrollar. Por ejemplo, las tiendas online desarrolladas en gestores de contenido como Prestashop, requieren servicios de alojamiento optimizados para este tipo de CMS.
Asimismo, los sitios de blogs, las landing page y los comparadores web, requieren diferentes tipos de alojamiento web para funcionar correctamente. En este sentido, las páginas web que poseen grandes cantidades de contenidos, como una web de películas online, puede requerir un servicio de hosting caracterizado por tener servidores con una gran capacidad de almacenamiento.
A su vez, las webs empresariales requieren servicios de alojamiento con servidores que realicen copias de seguridad periódicas, para evitar la pérdida de información. Estas son algunas de las variables que es necesario tener en cuenta al momento de contratar un servicio de hosting.
Principales ventajas de un buen servicio de alojamiento web
La mejor manera de reconocer la importancia de un buen servicio de hosting es realizar un pequeño repaso, por sus principales ventajas y beneficios, los cuales se mencionan a continuación.
Mayor velocidad
Una de las principales ventajas de invertir en un buen servicio de alojamiento web es la posibilidad de tener una plataforma online que destaque por su rapidez. Los servidores con una gran capacidad de transmisión de información, permiten a las empresas mostrar sus contenidos de forma mucho más rápida y eficaz.
Este es un aspecto de gran importancia, ya que la rapidez con la que cargan las webs es un factor que incide en la experiencia de navegación de los internautas. De esta forma, se puede reducir la tasa de abandono de las webs y se puede mejorar la imagen del negocio.
Mejora el posicionamiento SEO
En términos generales, un buen servicio de alojamiento web tiene la capacidad de optimizar el funcionamiento de las páginas web. Como resultado de ello, es posible subir posiciones en el índice de Google y ubicarse entre los primeros lugares.
Se trata de un beneficio de gran importancia, ya que el posicionamiento web determina la visibilidad de una plataforma web en Internet. En pocas palabras, al mejorar el SEO, es posible conseguir más visitas y atraer más compradores.
Seguridad garantizada
Los mejores servicios de alojamiento no solo garantizan la continua funcionalidad de las páginas en Internet, sino que además, ofrecen seguridad total. El objetivo es evitar ataques maliciosos o pérdidas de información, por lo que se realizan copias de seguridad y se implementan bloqueadores de IP y protección DDoS completa.
Como se puede observar, los servicios de hosting son un factor indispensable para el buen funcionamiento de los diferentes tipos de páginas web. Para acceder a todos sus beneficios, tan solo es necesario acudir a un equipo de expertos y contratar un servicio de alojamiento web a medida.