Mantener una buena salud bucal es importante. Pero no solo para conservar una sonrisa bonita. La boca es la puerta principal de la salud general del cuerpo, por lo que su cuidado y funcionamiento puede prevenir enfermedades como la diabetes o diversas cardiopatías. Por ello, es necesario tratar problemas relacionados con las encías, como la periodontitis.
Uno de los problemas bucales más frecuentes y perjudiciales para la salud general es la periodontitis. Se estima que al menos el 40% de la población mundial sufre de esta enfermedad inflamatoria y crónica que perjudica toda la estructura de soporte dentario a través de microorganismos bacterianos alojados en las encías.
Los malos hábitos y prácticas bucales desencadenan la periodontitis. Sin embargo, gracias al avance de la ciencia, centros médicos como la clínica Interoralia, ofrece múltiples y completos tratamientos de odontología tradicional con la más avanzada y moderna tecnología.
¿Qué es la periodontitis?
La periodontitis, conocida también como la enfermedad de las encías, es una infección que afecta los tejidos que dan soporte a los dientes y los huesos. Esta infección bucal es inflamatoria y crónica. Tiene su origen en los microorganismos bacterianos que se hospedan en la placa dental y el sarro.
La periodontitis en su estado más avanzado es capaz de debilitar y destruir, finalmente, el aparato de soporte dentario y, de esta manera, se inicia la pérdida de dientes.
Esta enfermedad bucal comienza con una gingivitis, que produce inflamación y sangrado de las encías al momento del cepillado de dientes o cuando se muerden los alimentos. De acuerdo a especialistas, el sangrado constituye un mecanismo de defensa del cuerpo en la lucha contra las bacterias alojadas en los dientes.
Aunque en principio la periodontitis solo supone encías hinchadas o enrojecidas, al no tratarse a tiempo mediante la periodoncia, con los años se expande a través de las encías y llega a perjudicar las raíces de los dientes. En algunos casos más avanzados, esta enfermedad causa daños irreversibles y permanentes.
Por suerte, esta enfermedad crónica es gradual, por lo que se pueden prevenir sus efectos más dañinos en las primeras fases.
Factores de riesgo de la enfermedad periodontal
Cabe destacar que en una boca sana conviven sin problemas más de 700 tipos de bacterias inofensivas. No obstante, si no se realiza una buena y completa rutina de limpieza y cepillado, poco a poco otros microorganismos bacterianos van hospedándose alrededor de las encías hasta formar una placa sobre los dientes, también conocida como sarro. Por este motivo, es importante estar atentos a los siguientes factores de riesgo:
Fumar
Uno de los principales factores de riesgo de la enfermedad periodontal es el tabaco. Los profesionales de la Salud bucal recomiendan dejar de fumar o bien, moderar el consumo de tabaco.
Las personas fumadoras son más propensas a desarrollar periodontitis, así como, la enfermedad evoluciona más rápido en ellos, que en los no fumadores. Además, el porcentaje de éxito de tratamientos de periodoncia es mucho menor en los fumadores.
Genética
Otro de los factores de riesgo de la periodontitis es la genética. En algunos casos, el sistema inmunológico reacciona diferente a los microorganismos bacterianos. Asimismo, ciertos pacientes son más susceptibles de padecer enfermedades de las encías que otras.
Estrés
Como en muchos otros aspectos de la salud general o mental, el estrés es una reacción fisiológica que también genera consecuencias en el funcionamiento de la cavidad bucal.
Desafortunadamente, el estrés es capaz de debilitar y disminuir la resistencia del sistema inmunológico. De esta manera, el cuerpo no crea resistencia a los microorganismos bacterianos.
Por otra parte, diversos estudios han determinado que las personas que padecen de estrés y depresión tienen una deficiente higiene bucal, por lo cual la carga bacteriana será mayor sobre las encías.
Dieta rica en alimentos procesados
Una dieta alimenticia deficiente es considerada un factor de riesgo para contraer gingivitis y periodontitis. Los carbohidratos refinados y los alimentos procesados suelen ser causantes de encías inflamadas.
Diversos estudios han asociado dietas poco saludables con el riesgo de sufrir diabetes. En este sentido, la periodontitis y la diabetes mantienen una estrecha y perjudicial relación para el soporte dentario.
Para prevenir la enfermedad periodontal es importante conservar una buena higiene dental, que incluya cepillado de dientes constante, hilo dental y enjuague bucal antiséptico.