Los problemas de la próstata nos pueden tomar por sorpresa, pues se van formando paulatinamente y muchas veces son detectados cuando están avanzados.
Pero una vez que hemos descubierto de qué se trata podemos emplear alternativas naturales que ayudan a proteger esta importante glándula masculina. Existen muchas plantas y nutrientes que se pueden convertir en nuestros aliados para combatir cualquier afección prostática.
En este artículo te enseñamos cuales son y cómo debes emplearlas para que puedas sacar el máximo provecho de las bondades que nos ofrece la naturaleza.
Plantas que nos ayudan a mantener sana la próstata
La próstata es una glándula del aparato genitourinario masculino, la cual se encuentra rodeada del cuello de la vejiga y una parte de la uretra. Tiene la función de verter el líquido prostático en la uretra para mezclarlo con el esperma y fortalecer la expulsión de los espermatozoides.
Esta glándula crece de manera gradual a través de los años mientras que el hombre produce hormonas. Al llegar la adultez por lo general reduce su tamaño, e incluso puede llegar a desaparecer, debido a la falta del producto glandular.
Una de las afecciones que sufre la próstata cuando el hombre se acerca al final de su etapa reproductiva es el aumento de tamaño, el cual se produce por infección y puede provocar grados variables de obstrucción uretral como hipertrofia, prostatitis bacteriana aguda, crónica e inflamatoria asintomática. .
Estas enfermedades originadas principalmente por la aparición de microorganismos en la orina pueden ser tratadas con recetas a base de frutas y plantas, que ejercen un efecto antiinflamatorio sobre la próstata sin causar efectos negativos en otros órganos.
Ortiga
La ortiga es una planta de la familia de las urticáceas y se caracteriza por tener pelos en sus hojas. Esta parte de la planta tiene una acción diurética, antiinflamatoria y relajante, particularmente del tejido prostático.
Además previene la formación de litiasis, tiene efectos positivos en el tratamiento de enfermedades inflamatorias de las vías urinarias y es coadyuvante de infecciones reumáticas.
La manera de consumir esta planta es a través de infusiones calientes, sin necesidad de agregar ningún otro ingrediente.
Semillas de calabaza
Las semillas de calabaza, también conocidas como pipas, son altamente efectivas para el tratamiento de adenomas (tumoraciones benignas) en la próstata, polaquiuria (necesidad de orinar frecuente) y pérdida de fuerza en la expulsión de la orina, necesidad de orinar frecuente.
Así como para desinflamar y relajar las vías urinarias, debido a su alto contenido de aceite, aminoácidos esenciales y cucurbitacina, principio activo para el tratamiento de las enfermedades relacionadas con la glándula masculina.
Es recomendable su consumo diario, preferiblemente tostadas.
Bayas de Sabal
El Palmito Salvaje o Sabal Serrulata es una palmera de grandes hojas que produce unas bayas, las cuales al madurar (cuando pasan de color verde a negro azulado) ayudan al funcionamiento más eficiente de los testículos y el nivel adecuado de los andrógenos y estrógenos plasmáticos.
Además mantiene acción fisiológica en casos de disfunciones atróficas testiculares e hiperplasia glandular y disminuye las molestias ocasionadas por el síndrome prostático.
Licopeno
El tomate es una fruta antioxidante que contiene licopeno, un carotinoide que tiene un efecto reductor en los niveles séricos del PSA (Análisis del Antígeno Prostático Específico) y en el daño oxidativo que aparece con el tiempo en el tejido prostático.
El consumo del tomate maduro y crudo surte mejores efectos para el cuidado de la próstata.
Zinc y selenio
Los frutos secos como almendras, avena, semillas de calabaza y avellanas, así como el pollo, hígado de res, carnes rojas, las almejas y las ostras, son ricos en zinc y selenio.
El zinc es un elemento que tiene un alto porcentaje de presencia en la próstata, pero sus niveles suelen disminuir en pacientes con cáncer de próstata, de ahí la importancia de de consumir los alimentos con alto contenido del mineral.
Además ayuda a controlar la proliferación celular y a su vez disminuye el volumen de la próstata. También actúa como un inhibidor de la transformación excesiva de la testosterona.
Polifenoles
La granada es una fruta de origen africano, con un sabor cítrico, muy agradable, con alto contenido de polifenol, sustancia que actúa como un regulador de los genes que afectan la síntesis de andrógeno evitando la proliferación de las células cancerosas.
Las semillas de la granada se pueden consumir solas, convertirlas en jugo o utilizarlas como ingrediente para determinadas ensaladas.
La combinación de estas plantas y semillas para preparar una infusión caliente es efectiva para tratar distintos problemas de próstata y retención de orina, debido a su alto contenido de propiedades diuréticas y antisépticas.
Síntomas de afecciones en la próstata
Es importante cuidar nuestra salud, por eso ante cualquier señal irregular en el funcionamiento de nuestro organismo debemos consultar con el médico y evitar resultados irreversibles.
Si observa los síntomas que mencionaremos a continuación usted puede estar sufriendo de la próstata:
- Ganas repentinas de orinar (sobre todo en la noche y cuando está sentado)
- Dificultad para expulsar por completo la orina que está en la vejiga
- Dificultad para comenzar a orinar
- Flujo de orina débil o interrumpido
- Ardor o dolor mientras orina
- Sangre en la orina o semen
- Eyaculación dolorosa
- Molestia y/o dolor en la espalda, caderas o pelvis
- Presión o dolor en el recto
- Palpitación rectal o genital
- Falta de libido
- Escalofrío y fiebre alta
Estos síntomas se pueden evaluar a través de un examen rectal digital y un análisis de orina, el cual determinará si efectivamente está sufriendo de la próstata y el tipo.
Consejos para evitar infecciones prostáticas
Para evitar problemas en la próstata y mantenerla sana es recomendable seguir las siguientes recomendaciones:
- No ingerir bebidas alcohólicas
- No fumar cigarrillos
- Evitar el sedentarismo, las comidas que puedan causar la acumulación de gases, el frío extremo, la humedad y el estreñimiento.
- Ingerir al menos un litro y medio de agua al día para mantenernos hidratados
- Reposar en posición horizontal después de ingerir alimentos.
- Evitar el consumo de alimentos con alto contenido de grasas saturadas y azúcar
- Consumir alimentos frescos
- Vaciar la vejiga varias veces al día, especialmente antes de dormir.
- Controlar el peso
- Realizar ejercicios físicos