Desde hace años, los amantes de la cerveza han buscado nuevas vías para descubrir los mejores y más originales sabores de esta bebida. De hecho, el número de pequeñas productoras de cerveza a baja escala se ha multiplicado por diez en los últimos nueve años en nuestro país, y las grandes cerveceras han tenido que devanarse los sesos para conseguir incluir en sus catálogos esos sabores artesanales que tan de moda están ahora mismo. Por ello, las grandes empresas no han visto más solución que acabar asociándose con las pequeñas productoras de cerveza para conseguir mejorar sus resultados frente a los otros competidores.
Y es que vivimos en una era en la que conseguir productos de distintos países, tipos y estilos se ha vuelto una tarea mucho más sencilla y asequible para el público medio. Es por esto que los aficionados a la cerveza se han puesto las pilas a la hora de explorar marcas, aromas y tipos de este brebaje, siempre con ojo crítico, y muy decididos a encontrar lo mejor de lo mejor.
LA TENDENCIA MÁS TRADICIONAL
Muchas empresas de producción de cerveza, sobre todo las más jóvenes y pequeñas, han tenido que sumarse a una ardua y competitiva carrera, donde se premian la personalidad y la capacidad de marcar la diferencia. Una de estas claras ganadoras es una Cerveza Artesanal de Euskadi, la Cerveza Artesanal BÝRA, creada y formada por maestros de tradición cervecera con fábrica propia, que tiene su origen en la Llanada Alavesa, situada entre Álava y el País Vasco. Esta es una de esas empresas cerveceras creada por verdaderos amantes de la bebida: una familia a la que no solo unen los lazos consanguíneos, sino su pasión por la cerveza y por explorar nuevos aromas y sabores únicos que sorprendan al público y le demuestren su valía en la industria.
La Cerveza Artesanal BÝRA tiene un objetivo y una filosofía más que claros: convertirse en ese referente de iniciación para tantas personas que buscan iniciarse en el mundo de la cerveza artesanal y probar nuevos sabores y aromas, así como cervezas más naturales que las industriales, producidas en masa.
Así, BÝRA está consiguiendo consolidarse en el sector cervecero gracias a las diferentes variedades que ofrece al público. En estos momentos dispone de seis variedades: ALPHA, una American Pale Ale sutilmente afrutada y con un ligero toque a pan tostado; SIGMA, una imponente Strong Bitter que ha obtenido números reconocimientos; GAMMA, una suave y cítrica Golden Ale, elegida entre las 100 mejores cervezas artesanas de España; OMEGA, una American IPA, con corteza de naranja y notable amargor; ENGEL, una refrescante Helles, elaborada sin gluten; y TEUFEL, una auténtica Märzen, Lager de doble malta.
INDICADORES DE ARTESANÍA
Uno de los más claros indicadores de la tendencia hacia la cerveza artesanal es la presencia cada vez más común de distintas catas y festivales de cerveza de este tipo. En estos eventos, podemos encontrar cientos y cientos de cervezas artesanales.
Además, os dejamos una buena noticia que puede interesar a los aficionados a la cerveza que no tienen tiempo para andar de catas y eventos: todas las variedades de la cerveza artesanal BÝRA están disponibles para ser adquiridas de forma online por medio de la tienda de Cerveza Artesana BYRA.
Pero, ¿qué necesita una cerveza para ser considerada artesanal? Muy sencillo: dedicación, tradición, búsqueda de una nota diferencial, y muchas ganas de marcar tendencia, como ha demostrado la Cerveza Artesanal Býra, destacando entre sus competidoras.
Y ahora bien, ¿Por qué triunfa tanto la cerveza artesanal? Nosotros creemos haber encontrado la respuesta: la cerveza artesanal carece de todos esos elementos que se suelen añadir sin titubeos a la producción en cadena. Es decir, esta cerveza se diferencia del resto por su falta de aditivos artificiales y de conservantes, ya que una de las partes más importantes del proceso de creación de cerveza artesanal es que todos sus ingredientes sean cien por cien naturales. Y en el mundo en el que vivimos hoy en día, era de esperar que lo más natural acabara creando tendencia.
