Sociedad

El jefe de Volkswagen se disculpa por el error nazi

El presidente de Volkswagen ha pedido disculpas por haber evocado un eslogan nazi para describir la importancia de aumentar los beneficios del grupo.

Herbert Diess utilizó la línea «Ebit macht frei» en un evento de la empresa el martes.

La frase se hace eco de la máxima «Arbeit Macht Frei» -que significa «el trabajo te hace libre»-, que fue blasonada en hierro forjado en las puertas del campo de concentración de Auschwitz.

Ebit es un acrónimo de uso común que significa «beneficio antes de intereses e impuestos».

En una declaración, el Sr. Diess dijo que lamentaba lo que describió como «definitivamente una desafortunada elección de palabras».

Explicó que se refería a la libertad de las marcas de VW para gozar de una sólida salud financiera, y añadió:

«En ningún momento tuve la intención de poner esta declaración en un contexto falso. En ese momento, simplemente no pensé en esta posibilidad.»

El director general alemán también reconoció la «especial responsabilidad de su empresa en relación con el Tercer Reich».

Volkswagen fue fundada en 1937, como parte de la visión del líder nazi Adolf Hitler de permitir a las familias alemanas tener su primer automóvil. Durante la Segunda Guerra Mundial, la empresa con sede en Wolfsburgo fabricó vehículos para el ejército alemán, utilizando a más de 15.000 trabajadores esclavos de los campos de concentración cercanos.

Aunque popularizado por los nazis, «Arbeit Macht Frei» fue acuñado por el lingüista, etnólogo y escritor del siglo XIX Lorenz Diefenbach.

Los políticos de la República de Weimar en la década de 1920 utilizaron la frase para promover políticas de empleo.

La inscripción apareció en el campo de concentración de Dachau, creado por Heinrich Himmler en 1933 para utilizar a los disidentes como mano de obra esclava, y más tarde pasó a formar parte del engaño de los nazis por el uso real de los campos de concentración.

La disculpa del Sr. Diess vino después de que el gigante automovilístico alemán Volkswagen dijera que reduciría 7.000 puestos de trabajo, ya que cambia su enfoque a los coches eléctricos, que requieren menos trabajadores para construirse.

A principios de esta semana, la empresa anunció unos beneficios anuales de 12.000 millones de euros (10.000 millones de libras esterlinas), a pesar de tener que pagar grandes sumas para compensar el escándalo de las emisiones de Dieselgate.