La validez legal de un documento traducido a otra lengua es esencial para los trámites personales y para eso existen empresas especializadas
Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) de España, el inglés es el idioma que más se traduce, tanto como lengua origen como lengua meta. Esto es lo que arrojan también los estudios sobre las empresas que se dedican a este servicio. Los sectores socioeconómico, científico y tecnológico son los de mayor demanda, además de empresas B2B, de las que hay la mayor cantidad de órdenes.
Servicios como la traducción oficial de un formulario de Hacienda, un requerimiento judicial o un libro de familia, se han convertido en una necesidad para muchos españoles. Este tipo de actividad, que tiene orígenes desde los años 90, ha obligado a una evolución de la industria, incluyendo el servicio de traducción oficial, para fines legales.
En Madrid
Una empresa que requiera que sus estatutos sean traducidos a otro idioma, así como los contratos que realiza con sus contrapartes en el extranjero, requiere de un servicio como los traductores jurados oficial en Madrid, ya que son documentos oficiales y muy delicados. La ventaja de contar con este tipo de ofertas en este sector, es que el traductor oficial puede hacer llegar el documento traducido con sello y firma del registro del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Más allá de ofrecer un servicio determinado, en el sector de la traducción jurada de documentos o textos específicos, lo primero en esta industria es atender al cliente, luego está la publicidad y la oferta de los distintos tipos de servicios ante la demanda y, finalmente, las ventas.
La presencia de estas empresas en Internet datan desde la década de 1990, sin embargo el servicio de la traducción jurada es la que tiene mayor peso o importancia. Un certificado de herencia, un certificado de matrimonio o un poder notarial, traducidos al inglés, francés, italiano, portugués, alemán u otro idioma, tienen validez en otros países al ser juradas de manera oficial y, además, se vuelven totalmente necesarias en situaciones de desplazamiento a dichos países. En términos legales la traducción jurada es, por tanto, imprescindible.
Entre los documentos que mayor tipo de traducción se realiza resaltan los expedientes y notas, tales como títulos, diplomas universitarios o expedientes académicos. Contratos, acuerdos, pactos y estipulaciones. Documentos de empresas como informes, memorias, noticias. Certificados penales, actas de defunción, sentencias de divorcio y partidas de nacimiento.
También informes médicos, artículos científicos y diagnósticos.
A través de Internet, gracias a la digitalización, las empresas y personas pueden hacer solicitud de presupuestos. Para los habitantes de Madrid, como es la capital, es muy sencillo encontrar un despacho de intérpretes y traductores jurados que ayudarán a que el solicitante obtenga la traducción de sus documentos con validez legal.
Además y gracias al trabajo telemático es suficiente con que una persona haga llegar una copia escaneada de su documento a la empresa de traducciones, recibiendo así por tanto un presupuesto acorde a lo requerido como el trabajo final en caso de aceptar. Según el INE, los pagos se realizan en su mayoría a través de transferencia bancaria, también con tarjetas de crédito o el pago contra reembolso. Esto gracias al comercio electrónico, recurso del que se sirven las empresas certificadas con normas de calidad como las ISO 9001 y las ISO 17100, y que hace que cualquier transacción sea segura.
Un ejemplo de lo anterior es la agencia de traducción Linguavox.
Existen en Madrid cerca de 3.000 traductores jurados, según los datos de la Oficina de Lenguas del MAE. Se manejan 36 idiomas de los 39 que contempla el ministerio en sus normas para designar traductores oficiales.
Precios accesibles
El coste de una traducción jurada depende de la lengua que se desee traducir, la cantidad de hojas que involucre el trabajo. Existen estándares como por ejemplo por una página, con tarifas fijas, las cuales, según el tipo de documento podría variar entre 50 y 80 euros más el impuesto. Si se trata de más hojas, aplica entonces la cantidad de palabras. En Madrid se dan presupuestos de manera gratuita.
La mayoría de las empresas de este tipo, emplean sus tarifas según el número de palabras del texto. En esto también se involucra la especialización del texto origen, si es necesario emplear un programa informático determinado.
El uso de Internet para la interrelación con los clientes, ha hecho que los procesos de traducción sean más fáciles de realizar, más rápidos y ordenados, lo que se refleja en la calidad de las traducciones finales.