Al menos diez personas han muerto y otra treintena han resultado heridas, una de ellas de gravedad, en el incendio declarado durante la madrugada en un inmueble en el acomodado distrito 16 de París, en el suroeste de la capital francesa. Las autoridades privilegian la pista criminal y han detenido a una vecina, una mujer de 40 años residente en el inmueble y aparentemente con problemas psiquiátricos, como presunta autora del siniestro.
El número de fallecidos aumentó después de que los bomberos hallaran, en horas de la mañana, los cadáveres de dos personas más al inspeccionar el edificio, según la Agencia France Presse. El portavoz de los bomberos de París, Clément Cognon, ya había advertido de que la cifra de víctimas, inicialmente de ocho, era “provisional”, puesto que todavía no se ha podido acceder a todos los apartamentos para verificar que no hay más víctimas.
Aunque el incendio, que se desató pasada la medianoche, quedó controlado hacia las 6.30 de la mañana, las tareas de asegurar el inmueble y sus alrededores durarán al menos otras 24 horas, adelantó por su parte el ministro del Interior, Christophe Castaner, que se desplazó hasta el inmueble siniestrado en horas de la mañana junto a su par de Vivienda, Julien Denormandie, el fiscal, Remy Heitz, y la alcaldesa de París, Anne Hidalgo.
Hay pocas dudas sobre la intencionalidad del siniestro. El fiscal explicó que se ha abierto una investigación por “incendio voluntario” con resultado de muerte y heridos y que la sospechosa está ya bajo detención preventiva. Se trata, explicó Heitz, de una mujer de 40 años que “presentaba antecedentes psiquiátricos”. La sospechosa, vecina del edificio incendiado, fue detenida en la calle inmediatamente tras desatarse el fuego, agregó. Según las emisoras France Info y BFM, la mujer presentaba signos de ebriedad en el momento de su arresto.
La extinción del incendio, según testigos “de una violencia increíble” y que comenzó en el segundo piso, exigió la intervención de unos 200 bomberos. La particularidad del edificio, una construcción de los años 70 de ocho plantas erigida en torno a un patio, dificultó las tareas, ya que los bomberos se vieron obligados a acceder “planta por planta” mediante escaleras manuales, dado que los camiones con las mecánicas no llegaban hasta el lugar del siniestro.
El fuego sorprendió a muchos vecinos dormidos, lo que, sumado a la velocidad con la que se propagaron las llamas, puede explicar el elevado número de víctimas, según medios locales.
Pese a ello, destacó Castaner, los bomberos pudieron salvar a más de 50 personas. Algunos vecinos se refugiaron en los tejados para escapar de las llamas, lo que dificultó más aún las tareas de salvamento, señalaron las autoridades.
Una explosión de gas en una panadería del centro de la ciudad provocó un importante incendio en el centro de París el pasado 12 de enero, en el que murieron cuatro personas, entre ellos una turista española.