Identificadas en campos navarros un total de 7 víctimas de origen portugués, captadas en entornos sociales muy vulnerables, y a las que los empleadores mantenían en condiciones «inhumanas»
La Guardia Civil ha detenido a dos personas en Navarra por varios delitos de Trata de Seres Humanos con fines de explotación laboral y un delito contra los derechos de los trabajadores, y ha identificado a siete de sus víctimas, ciudadanos portugueses captados en entornos sociales muy vulnerables.
Según ha informado en una nota el Instituto Armado, las investigaciones comenzaron en enero y han sido desarrolladas por miembros de la Guardia Civil de Navarra con apoyo de la Inspección de Trabajo de Navarra para la realización de varias inspecciones en el campo, donde se han identificado a «un gran número de personas» en trabajos relacionados con la poda de las viñas así como en su vendimia.
En las investigaciones se ha comprobado que las jornadas laborales de estos trabajadores eran «muy superiores» a los estándares regulados y con un sistema de remuneración en el que uno de los detenidos, conocido como el «Patrono«, recibía el total de los jornales, y él mismo realizaba el reparto una vez finalizaba la temporada, descontando la parte que consideraba propia para gastos de alojamiento y manutención.
Las condiciones en las que estos trabajadores estaban alojados eran «especialmente insalubres«, de forma que vivían «hacinados» en varios contenedores como los utilizados en el transporte de mercancías, que se encontraban en el jardín de la casa del «patrono» y que eran los lugares donde las víctimas dormían, cocinaban y comían.
Los agentes participantes han determinado cómo los presuntos autores, de origen portugués, captaban a sus víctimas en Portugal, en entornos sociales extremadamente vulnerables, de forma que muchas de ellas no saben leer ni escribir y cuentan con escaso o nulo arraigo familiar y carecen de cualificación laboral, aunque les ofrecían unas condiciones de trabajo aparentemente atractivas.
Posteriormente las trasladaban hasta Navarra para realizar labores agrícolas en las diferentes campañas, en unas condiciones precarias y vulnerando muchos de sus derechos laborales.
Con este sistema, los llamados «patronos» se aprovechaban de los trabajadores para conseguir unos importantes beneficios económicos.
Como muestra de ello, la Guardia Civil indica que las bodegas o empresas abonan una media de 6 euros por hora y trabajador que realiza 9 horas diarias, aunque según los propios trabajadores identificados, por cada hora de trabajo en el campo realizando a mano las podas de las viñas, el «patrono» les pagaba una cantidad que apenas superaba los 2 euros por hora trabajada.
Aparte, a cada uno de ellos les cobraba cantidades que oscilan entre 20 y 25 euros diarios por darles alojamiento y comida, por lo que las ganancias del patrono se veían incrementadas en relación a cuanto mayor número de trabajadores acogían.
OPERACIONES EN NAVARRA CONTRA LA EXPLOTACIÓN LABORAL A lo largo de 2018 la Guardia Civil de Navarra ha desarrollado diferentes operaciones para luchar contra esta lacra. Hace apenas un mes, en el marco de la ‘Operación TARANIS’, se desarticulaba otra red similar a la de esta ocasión.
La ‘operación TARANIS’ y la ‘operación BRIGADO’ suman en su conjunto un total de seis detenidos y un investigado por varios delitos de trata de seres humanos con fines de explotación laboral, ascendiendo el número de víctimas identificadas a 37, todas de origen portugués.
Estas investigaciones se enmarcan dentro de la actuación conjunta que desarrollan la Guardia Civil, la Policía Judiciaria y el Servicio de Extranjería y Fronteras (SEF) de Portugal para prevenir y perseguir los delitos relacionados con la trata de seres humanos y contra los derechos de los trabajadores, y de dar protección a las víctimas que trabajan en labores agrícolas en Navarra.
En la operación se ha contado con la participación activa de la Inspección de Trabajo de España y la Fiscalía de Navarra.