Si el futuro es de por sí virtual, la tecnología no ha hecho más que rizar el rizo. Los 1.500 jóvenes que ayer acudieron a la última jornada de EL PAÍS con tu futuro, en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid, lo aprendieron a través de la experiencia de más de una veintena de profesionales que han vivido la transformación digital. Los expertos cedieron el protagonismo y la responsabilidad a los ahora estudiantes de inventar ese futuro con la ayuda de la tecnología. Los jóvenes se sienten desorientados ante un panorama laboral incierto por la velocidad de los cambios que atraviesan la mayoría de sectores.
La periodista Marta García Aller pidió calma cuando se habla del fin del trabajo, pues en su opinión solo dejarán de existir aquellos puestos relacionados con una rutina, los que pueden hacer mejor las máquinas.Estas precisan de un dominio técnico y también ético sobre el que habló la “roboticista”, como ella misma se definió, Concha Monje. “Debemos aprender a controlar las máquinas, saber cómo funcionan para ser críticos con ellas, también para no tenerles miedo y hacer un uso responsable”. La investigadora restó ciencia ficción: “Hay que ser conscientes de que los robots son limitados en sus funciones”.
La tecnología ha provocado que las personas vivan en otro plano, el virtual, y a este se han trasladado algunos problemas del mundo físico. Sara Pérez, directora de Ciberseguridad de Openbank, el banco digital del Santander, compartió cómo llegó hasta este puesto para concluir que “el primer paso no siempre marca el camino” y, si bien la carrera la ayudó, no determinó su destino. En este dato la apoyaron sobre todo los emprendedores, como Clemente Cebrián, cofundador de la marca de moda El Ganso. Describió como tras licenciarse en Empresariales por Cunef decidió crear su propio proyecto. En cambio, matizó que la formación no es una decisión vacía, pues “esos conocimientos acaban saliendo tarde o temprano y pueden marcar la diferencia”. La muestra fue Andrés Cadenas, director de Construcción de Red Eléctrica en España, quien comenzó como estudiante de Telecomunicaciones y continuó su formación en esa senda.
Los ponentes, entre ellos las orientadoras de Universia Ana Abdala y Beatriz Rodríguez, lanzaron varias peticiones a los estudiantes. Primero, que no se dejase influir por comentarios desinformados o la presión familiar. Después, que se rodeasen de expertos.Se lo aconsejó también Miguel Arias, director global de Emprendimiento de Telefónica, quien además les recomendó que pusieran el foco en ser los mejores en un aspecto que formase parte de una pasión
Esta palabra fue una reiteración. Una persona pasa una media de 100.000 horas trabajando a lo largo de su vida, así que lo mejor es invertirlas en algo satisfactorio. Como hizo Almudena Casas, licenciada en Turismo por Les Roches. Su amor por el turismo la llevó a especializarse como directora de hospitalidad de la cadena hotelera Marriot. Ana Terrado, responsable de marketing de la marca de agua Auara, relató cómo optó por ayudar a esta empresa, que destina parte de sus beneficios a proyectos solidarios. “Hoy en día es difícil que una compañía que solo se preocupa por ganar dinero prospere”, aseveró, incidiendo en que es preciso tener valores que marquen la diferencia.