Sociedad

20 años de cárcel para los padres de una bebé que murió por malnutrición

Desde que nació nunca fue bien alimentada. Y con solo tres meses falleció a causa de una “malnutrición severa”, según recoge una sentencia judicial. Por ello, la Audiencia Provincial de Málaga ha condenado a sus padres, Esmeralda M. B., de 22 años y Rafael N. M., de 27 años, a 20 años y un día de prisión como autores de un delito de asesinato con agravante de parentesco. El tribunal considera que los progenitores dejaron de prestarle los más elementales cuidados desde el primer día “de forma deliberada y reiterada, siendo conscientes de que con tal falta de cuidados le podrían provocar la muerte, lo que aceptaron».

Todo ocurrió en 2016. La pequeña nació el 6 de agosto de aquel verano. Jamás fue alimentada correctamente: sus padres siempre le dieron biberones que contenían una cantidad insuficiente de leche maternizada, según se recoge entre los hechos probados por el tribunal. Ello derivó en un estado de malnutrición severa: si la bebé nació con un peso de 3,6 kilogramos y una talla de 52 centímetros, tres meses después pesaba 2,9 kilogramos y superaba por poco los 54 centímetros.

La resolución judicial indica que la pareja era “consciente” de estar proporcionando a su hija una alimentación insuficiente para que pudiera subsistir. También de que sabían que ello podría provocarle la muerte dada la situación de absoluta indefensión del bebé «y por ser Esmeralda y Rafael las únicas personas que se encargaban de atenderla”. Algo que no les impidió “continuar alimentándola de esa forma, no acudiendo a solicitar asistencia médica, pudiendo hacerlo, ya que les resultaba indiferente que se pudiera morir”. La niña también presentaba un traumatismo craneoencefálico sufrido por una caída apenas unos días antes de su fallecimiento. Sus padres, presentes en el momento del golpe, no la llevaron a ningún centro sanitario para que fuese reconocida.

Todos los hechos derivaron en el fallecimiento de la pequeña en el domicilio familiar, que ocurrió durante la madrugada del 10 de noviembre de 2016. Según el tribunal, la causa fundamental de la muerte fue la “malnutrición severa” que sufría la menor y la causa inmediata una bronconeumonía provocada por la falta de alimentación, ya que afectó a su sistema inmune causando una infección terminal. También el traumatismo contribuyó al fallecimiento.