El sacerdote español Iván Merino Pedial, de 35 años, detenido en Venezuela por abusar sexualmente de una niña de 12 años, fue hasta hace tres años profesor del colegio Santo Tomás de Villanueva, de Granada, de la orden de los Agustinos Recoletos. Ni en España ni en Venezuela constaban quejas por su comportamiento, según han informado fuentes de la orden religiosa a la que pertenece. El secretario de Gobierno del Estado de Zulia, Lisandro Cabello, informó este miércoles de que existen indicios de «otras violaciones y otras víctimas» y aseguró que fue enviado a Venezuela castigado por ello.
El cura ha confesado los abusos ante la policía, que ha difundido su declaración en un vídeo publicado en Twitter. Merino admite que “nos encariñamos y el juego… y una cosa llevó a otra”, en referencia a los abusos sexuales. Cuando el policía le recrimina su actitud, él solo calla. Posteriormente reconoce que conoce a la madre de la niña, pero precisa que la familia de la víctima no sabía lo que estaba ocurriendo.
Merino es natural de Motril. Sus estudios religiosos comenzaron en la casa de formación de los Agustinos Recoletos de Burgos. Posteriormente, continuó en el centro de Monachil (Granada) y en Roma. Su primer destino fue el colegio de la orden en Granada, donde ejerció como profesor de religión, han precisado las mismas fuentes.
Hace tres años, Merino fue trasladado a Venezuela «para apoyar la labor pastoral». Actualmente es vicario de una parroquia de Maracaibo. Los Agustinos Recoletos han señalado que no recibieron ni denuncias ni quejas verbales durante los años que fue profesor en Granada. Tampoco en los tres años que lleva en Venezuela tuvieron noticia de ningún abuso hasta su detención en Maracaibo el pasado domingo.
La orden ha manifestado su deseo de colaborar con la justicia. “Siempre hemos repudiado, repudiamos y repudiaremos cualquier acción que atente contra la dignidad de la persona humana y mucho más si quien es afectado es un menor de edad», han señalado.