Sociedad

Los disturbios de Lavapiés: Un año después, ¿ha cambiado algo realmente?

Hace un año, un vendedor ambulante senegalés murió tras ser perseguido por la policía. Se produjeron disturbios y las calles de Lavapiés se llenaron de un olor acre a goma ardiente. En el primer aniversario de la muerte de Mame Mbaye, Leah Pattem, residente del barrio de Madrid, se pregunta si ha cambiado algo realmente.
Me estoy acostumbrando al sonido de los helicópteros flotantes, pero ¿qué puedo esperar, viviendo en Lavapiés? Vivo en un barrio tan rutinariamente empujado al límite que, de vez en cuando, la presión se vuelve demasiado fuerte y su gente se quiebra.

HACE UN AÑO

Seguimos el sonido de los helicópteros flotando hasta que llegamos a una línea de frente de la policía que avanzaba por la calle Mesón de Paredes. Los problemas estaban al otro lado de las luces azules parpadeantes, a sólo 50 metros de distancia, y los escombros estaban calientes bajo nuestros pies mientras caminábamos sobre motocicletas en llamas, cubos de basura derretidos, ladrillos y pedazos de vidrio. Las calles olían a caucho quemado y parecían una zona de guerra.

LA MUERTE DE MAME MBAYE

Horas antes, la emigrante senegalesa Mame Mbaye sufrió un paro cardíaco mortal. La policía dijo que lo encontraron tirado fuera de su casa y trató de resucitarlo, pero sus amigos dicen que los agentes lo habían perseguido, causando que sufriera un ataque al corazón – esta fue la versión que desencadenó los disturbios.

Decenas de migrantes se reunieron rápidamente y crearon un bloqueo humano a ambos lados de la calle del Oso, impidiendo que la policía se llevara el cuerpo de Mame Mbaye. Sus amigos y camaradas querían respuestas antes de que la escena del crimen fuera desmantelada y arrasada para siempre.

El prolífico fotógrafo humanitario Olmo Calvo agarró su cámara e hizo una línea recta para los disturbios. Sus fotografías continuarían proporcionando un relato de primera mano de lo que sucedió esa noche.